2.10.2009

¡No Soy Antisocial!

Cuando me refiero a mi Desorden de Personalidad de Evasión o a mi fobia social, mucha gente lo confunde con el Desorden de Personalidad Antisocial, lo cual es totalmente diferente. El ser antisocial puede llegar a cometer los peores crímenes en contra de la humanidad sin que sienta la necesidad de alejarse físicamente de las personas.

Cómo lo dije, el Desorden de Personalidad de Evasión se define como la inhibición en situaciones sociales, sentimientos de ser inadecuado e hipersensibilidad a la crítica, mientras el Desorden de Personalidad Antisocial se caracteriza por un irresponsable, impulsivo, sin escrúpulos y a veces criminal comportamiento en contra de otros seres humanos.

En sus inicios, a este desorden psicológico solía llamársele “demencia moral”, porque la gente que lo presentaba no mostraba tener moral ni decencia común. Más tarde se le llamó sicópatas a quienes lo padecían. El término actual: “personalidad antisocial”, es más apropiado para quienes son problemáticos pero no “dementes” por los estándares legales. Se calcula que un 3% de los hombres y un 1% de las mujeres en Estados Unidos son diagnosticados con este desorden.

La persona antisocial generalmente es encantadora, inteligente y de hablar rápido, es ese tipo de personas que obtienen dinero prestado para nunca devolverlo, son arrogantes, egoístas y manipuladores que pueden lograr fácilmente que los demás hagan cosas por él/ella, usualmente usando la mentira y tomando ventaja de la decencia y la confianza de los demás. Espero que no reconozcas este comportamiento en nadie cercano…..

Aquellos que desarrollan una personalidad antisocial no muestran ansiedad, remordimiento o culpa, ya sea al dañar un objeto ajeno o al matar a una persona inocente. No se ha encontrado un método para cambiar el comportamiento de estas personas antisociales, quienes además son poco sensibles al castigo.

Todo parece indicar que ser antisocial tiene una predisposición genética, sin embargo existen especialistas que no descartan que hogares rotos, el rechazo por los padres, la pobre disciplina, la falta de buenos modelos paternales y la falta de cariño en la edad temprana, contribuya al desarrollo del Desorden de la Personalidad Antisocial. Un análisis a personas como Charles Manson pueden apoyar esta teoría.

No me molesto cuando las personas confunden mi evasión social con ser antisocial porque se que es debido a la falta de información. He visto como otras personas se llaman “antisociales” a sí mismas, equivocando el término. Aún cuando no existe la ofensa de mi parte, me pareció importante informar acerca de la diferencia.

4 comentarios:

Karina Velazquez said...

Al menos yo nunca he creído que seas antisocial, definitivamente una fobia es diferente a lo que describes...

Y como te decía en el primer post que pusiste sobre esta fobia, creo que todos la tenemos en mayor o menor medida, yo creo que yo la comparto en cierto grado, pero en cierta forma la voy superando, si tú quieres la superaras (sea sola o buscando ayuda).

Saludos y gracias por poner liga a mi blog :)

Apuntes de Futbol said...

Me parece muy interesante lo que escribiste, primeramente hay que reconocer quienes somos para poder entendernos, leer mas acerca de personas similares a nosotros o mas bien leer mas acerca de las virtudes y defectos que tenemos nos hace comprendernos mas a nosotros mismos, me considero un evasor social, y desgraciadamente no he leido mucho del tema pero espero leer mas para entenderme a mi mismo y lograr que el resto lo haga.

Anonymous said...

El termino bastante manoseado pero creo que que lo abordas de la manera correcta.

Manson en particular fue un caso muy particular, pero si seguimos los patrones que mencionas, muchos por no decir la mayoría de los asesinos seriales caerían en seres "antisociales".

Ser antisocial de repente se pone de moda porque se relaciona falsamente con la originalidad.

Saludos

Apolo Cipariso said...

Me ha impactado bastante el título de tu artículo por que como persona que sufre de fobia social bastante intensa llegó un momento en que llegue a preguntarme que si no tenía amigos fuera por que quizás pudiera ser antisocial. Nada más lejos de la realidad, siempre me califican en la universidad de persona simpática, maja y pacífica pero hay momentos en que por culpa de mi tendencia a la evitación y a distanciarme que pienso que es por que no quiero relacionarme, sin embargo no es así; a pesar de lo mucho que falte a las clases.

No olvidemos las increíbles ganas que tenemos las personas evitativas de ser queridos y la gran necesidad de afecto que llevamos por dentro bien oculta bajo una mascarada de falsa fortaleza para evitar preocupar a los demás a diferencia del antisocial.

 

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